Tradicionalmente la infertilidad es un problema que con frecuencia se ha asociado erróneamente a la mujer. El rey de Inglaterra Enrique VIII, famoso por haberse casado hasta en seis ocasiones, era conocido por muchos como el rey que mataba a sus esposas.
Medicina natural una alternativa que mejora notablemente la calidad del plasma seminal
Tradicionalmente la infertilidad es un problema que con frecuencia se ha asociado erróneamente a la mujer. El rey de Inglaterra Enrique VIII, famoso por haberse casado hasta en seis ocasiones, era conocido por muchos como el rey que mataba a sus esposas. Este soberano acabó con la vida de algunas de sus consortes porque estaba convencido de que eran las culpables de su falta de descendencia. La realidad era que la causa de no poder concebir se encontraba en el monarca. Posteriormente algunos estudios sugirieron que Enrique VIII tenía el síndrome de McLeod, una alteración genética que hacía casi inviable que pudiera tener hijos varones. Hoy en día, la infertilidad ha dejado de relacionarse exclusivamente con la mujer y cada vez más se habla de infertilidad masculina o mixta, es decir, de la pareja.
A pesar de que un 60% de las parejas consiguen concebir durante el primer año de intentos, el 40% restante tiene problemas. Es entonces, tras un año de relaciones sexuales sin protección, cuando se puede empezar a hablar de un posible problema de infertilidad. La causa puede ser tanto masculina como femenina. A pesar de que la genética es determinante, existen factores de riesgo que aumentan las posibilidades de tener problemas de fertilidad. La propia edad (por encima de los 40 años) y los hábitos de vida poco saludables son los principales agravantes. Además, “en los países más avanzados, la calidad del semen ha disminuido de forma general debido a la presencia de factores ambientales tóxicos y al estrés”, explica Eduard Ruiz-Castañé, director del servicio de andrología de la Fundació Puigvert.
Ser infértil no significa ser estéril. A diferencia de la esterilidad (imposibilidad completa para engendrar), para la infertilidad masculina existen actualmente multitud de tratamientos que posibilitan la concepción. “Cada vez conseguimos más embarazos de una manera casi segura, sólo en porcentajes muy pequeños no se logra”, afirma el especialista. Muchas veces la infertilidad es debida a problemas que pueden ser directamente tratables y que, una vez corregidos, mejora notablemente la capacidad fértil del hombre. Esto es el caso, por ejemplo, del varicocele (varices en los testículos). Este problema afecta al 40% de los hombres infértiles y con una simple operación puede aumentar notablemente su capacidad reproductiva. Existen otras situaciones, sin embargo, en las que no se encuentra un motivo por el que el hombre tiene dificultades para dejar embarazada a su pareja. Para estos últimos casos, hasta hace relativamente poco las parejas contaban con escasas alternativas, principalmente las técnicas de reproducción asistida. Éstas no están exentas de riesgos. El varón también podía someterse a tratamientos hormonales, que no siempre dan buenos resultados. Actualmente, sin embargo, para aquellos casos en los que no se encuentra un motivo aparente, una alternativa podría ser la medicina natural. A pesar de que se necesitan estudios que demuestren su efectividad real, cada vez son más los hombres que optan por esta opción. L
os tratamientos naturales son complementos nutricionales que aportan multitud de nutrientes y sustancias antioxidantes. Algunos de estos nutrientes son la vitamina E, la L- carnitina, el zinc, el selenio o los ácidos grasos omega 3. Algunos de los antioxidantes naturales más conocidos que también aportan estos tratamientos son los tocoferoles o palmitato de ascorbilo, entre otros tantos. Todo ello, afirma el especialista, suma efectividad y ayuda notablemente a mejorar la calidad del plasma seminal, llegando incluso a mejorar otros aspectos que no estaban dañados. Se trata de una medicina empírica que a pesar de no actuar sobre la raíz del problema, como lo hace la medicina tradicional, mejora notablemente la capacidad fértil del hombre y sin efectos secundarios. “La gente cada vez má opta por tratamientos naturales, éstos están de de actualidad”, afirma Ruiz- Castañé.